jueves, 8 de agosto de 2013

INSUFICIENCIA VENOSA CRONICA (VARICES) Segunda Parte.

Como explicabamos en un post anterior, en la prevención y el cuidado de la insuficiencia venosa crónica son de suma importancia las medidas higiénico - dietéticas; pero cuando estas no son suficientes se hace necesario la introducción de otros tratamientos  sin que esto signifique que debamos olvidar lo anterior.
Si echamos un vistazo a los diferentes tratamientos encontramos fármacos, intervenciones estéticas y distintas técnicas quirúrgicas algunas muy novedosas y no al alcance de todos los pacientes.

                                                                                                                                                                            Dentro del tratamiento farmacológico  nos encontramos los fármacos antivaricosos-flebotónicos que
se utilizan para aliviar las molestias y pueden incluso prevenir el progreso de las enfermedad. Acúan tonificando las paredes de las venas alteradas y estimulando la circulación, pero para que sean efectivos han de tomarse de forma regular y durante periodos de tiempo prolongados. La mayoría de medicamentos son derivados naturales de un vegetal, el extracto seco del castaño de Indias (la escina); aunque actualmente son de venta libre sin receta médica ( no están financiados), es aconsejable consultar al médico quien determinará si están indicados y a que dosis deben tomarse. 







 El siguiente paso serían los tratamientos invasivos; comienzo explicando la escleroterapia de varices, este tratamiento se puede aplicar a venas de pequeño calibre, es decir, las conocidas como "arañas vasculares". Usando una aguja muy fina se inyecta dentro de la vena un medicamento esclerosante mezclado con un anestésico local, despues de repetir el proceso en dos o tres ocasiones las paredes de la vena quedan "rellenas" por el material, eliminandose así el paso de la sangre y haciendo que desaparezcan a la vista. 




La cirugía de las varices es muy practicada, casi tanto como la de cataratas; existen muchas técnicas quirúrgicas y es el médico el que debe proponer las que más  se ajuste al paciente, sin olvidar tampoco la disponibilidad según el área donde se viva.  El stripping o varicectomía es la técnica quirúrgica clásica, se utiliza cuando las varices son muy grandes y consiste en extirpar las venas afectadas. Puede realizarse con anestesia general o epidural y el paciente puede permanecer hospitalizado uno o dos días.

Otras técnicas más novedosas son las de cirugía endovenosa, que consisten en cauterizar la vena y retraerla con la ayuda de un láser o una sonda. Estos procedimientos pueden ser una buena altenativa a la cirugia tradicional, son menos traumatizantes, se pueden realizar con anestesia local, las molestias postoperatorias son menores y el paciente puede reincorporarse antes a sus actividades habituales.

También se puede realizar microcirugía, en este caso se mantienen todas las venas, incluidas las afectadas, se realizan pequeños cortes  y se intenta rehabilitar la vena para que funcione adecuadamente. Se puede llevar a cabo con anestesia local, el paciente camina a las pocas horas de la intervención y las pequeñas incisiones apenas se notan.

Existen otros métodos más novedosos, la mayoria de ellos llevados a cabo en centros de estética o clínicas dedicadas especificamente a esta patología. La oferta es inmensa, desde aquí solo podemos recomendar la valoración y asesoramiento por un profesional capcitado, que ayude al paciente a tomar la decisión que más se ajuste a su padecimiento.



Eva María Fagundo Becerra
Médico de Familia
 

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